NO LLORES CUANDO
LLUEVE
No llores cuando llueve,
demasiadas lágrimas caen del cielo,
son las lágrimas de los niños muertos,
de los que murieron
en forma injusta
y tienen la esperanza de la resurrección.
No llores cuando
llueve,
lava tus ojos con
agua de lluvia y verás un mundo
distinto.
Un mundo infinito de ángeles blancos y rubios
pero también de
angelitos negros
con ojos grandes como uvas maduras;
si pones alas a tu imaginación y abres las puertas de tu
alma,
encontrarás en cada
gota
la mirada de quien se
fue de tu lado
pero sigue presente en cada flor,
en el vuelo del colibrí que te visita cada mañana
y en el brote nuevo del jardín.
Recuerda, lo dijo el
poeta:
llorar el sol de ayer
impide ver el sol de hoy.
Seca tus lágrimas y
sonríe,
dile a tu corazón que fue una broma,
que lo hiciste
solamente para que alguien
te ponga la mano
sobre tu cabeza y te diga:
-no estas sola- sonríe.
María A. Manzione. 2016.